¿Tienes problemas con la señal de tu WiFi? ¿la señal no llega a tu cocina o al patio? ¿la señal es pésima? ¿quieres dejar de sufrir? Bien te daremos un pequeño truco, sencillo y económico (si comparas comprar un nuevo router, que es para llorar) para que disfrutes el WiFi donde quieras.
Lo que necesitas para este truco son: a) Una lata ya sea de cerveza, refresco o jugo (siempre que sea una lata), y b) plastilina. ¡Sólo eso! pero si quieres el resultado esperado debes seguir al pie de la letra los siguientes pasos:
1. Primero que nada, vacía la lata y luego quitas el anillo de la lata.
2. Corta la lata: primero la parte inferior, repitiendo la misma operación con el otro extremo de la lata.
Puedes usar unas tijeras o cuchillo (pero no te vayas a cortar ¡USALA!)
Pero cortes completa la tapa superior, déjale unos centímetros.
3. Haz un corte a lo largo de la lata y extiéndela hasta lograr esta forma
4. Ahora, con la plastilina vas a pegarla en la parte superior de la lata.
5. Coloca la antena del router a través de la parte superior de la lata.
La plastilina debería mantener la antena en su sitio. Y listo!!
Ahora compra una cerveza fría y disfruta tu nuevo router recargado!!!
**Eso si no nos responsabilizamos si tu Internet es una mierr… no somos magos sabes.
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